Suplantaron mi identidad.
Perder su identificación personal es un infierno de dudas y frustración.
Es una Pesadilla despierto. Sus pensamientos se centran en si alguien va a
dañar su crédito y por añadidura su reputación. Conozco un amigo que su mejor
empleado ha sido acusado de retirar electrodomésticos y dinero con su
identidad.
Naturalmente, ningún timador va a entregar sus documentos legales
para actividades fraudulentas. O, al menos, no creemos que haya
alguien tan estúpido. Pero sabemos que cuando eso
sucede con la única prueba que cuenta una institución timada es con los recibos
firmados o, copias de la cédula del quien hizo la transacción. Cuando
al muchacho le informaron que lo requerían las autoridades para indagar el
caso. Solo atinó a decir: suplantaron mi identidad.
Mientras se investiga el caso, el pobre muchacho está recibiendo un
trato como cualquier ladrón o, asesino confeso. Esto es muy penoso, porque no
solamente el acusado sufre. También sufren sus familiares, sus amigos y en este
caso su patrón, que esta como loco defendiendo su muchacho y corriendo con los
gastos de tal proceso. No son solamente gastos, también hay perdidas. Pues,
mientras se investiga el caso, su negocio debe buscar otro empleado para
la sustitución. Además; Seguir pagando su sueldo, hasta que el caso sea visto
por un juez que tome la decisión correspondiente.
El más despreciable de todos los delincuentes es el ladrón. No
respeta ni a su madre. Cuando sus documentos son robados o, extraviados y
caen en manos de delincuentes tecnológicos. Estos pasan la vida estudiando como
timar sin ser descubiertos, para cargar a otros su culpa. Los delincuentes son
muy habilidosos. Son tan habilidosos que cuelgan letreros donde se reúnen
muchas personas. Que dicen:
Cuidados con los carteristas. Si usted posee dinero en su cartera, consiente
o, inconscientemente, se lleva la mano a su bolsillo, y ellos que están
observando, ya saben que usted tiene algo que cuidar y se le tiran.
Como sucede el fraude Cuando los delincuentes tienen
los documentos en su poder, realizan modificaciones. por ejemplo; cambiar la
fotografía o, suplantar los nombres. Luego acuden a establecimientos
comerciales y realizan compras con los documentos sustraídos. Las instituciones
bancarias no detectan el engaño hasta que pasan dos o tres meses, desde el
pago. Cuando empieza el proceso de cobro de la institución timadas, Comienza el
proceso de investigación. Si los delincuentes lo eligieron a usted en la
tómbola de la desgracia, comienza el infierno. La investigación es larga y
tediosa. Mientras el individuo a quien le han suplantado el documento, pasa por
un proceso judicial incomodo y a veces mal estructurados. De toda forma el
imputado tiene que pagar los gastos de su defensa larga y con muchas trampas.
Deberíamos de: Desarrolla una
estrategia más dinámica que permita destetar los
fraudes tecnológicos. Someter un régimen serio de protección, para
saber que los datos que está suministrando el comprador son correctos. También creemos Que
los imputados deben tener otro tipo de trato, hasta que, no sea investigado de
fondo el caso.
Como proceder en caso de documentos extraviados.
Haga su denuncia a la policía, reportando la pérdida de
su cédula o, tarjeta de crédito o, pasaporte y celular.
Pida hacer una copia de la declaración deje su número de teléfono y su
dirección. Con números de teléfono alternativos.
Comunique de inmediato a la institución donde se realizó el fraude.
si no reporta inmediatamente puedes pagar por ellos.
Consulte a un abogado.
No realice ningún pago de una deuda fraudulenta hasta que no lo decida
un juez.
Suministre toda la información que necesite la policía y las
instituciones bancarias.
Armando Calvo. #comunicadores